EE. UU. entra en su cierre de gobierno más largo

Estados Unidos enfrenta el cierre de gobierno más largo de su historia, luego de que el Congreso no llegara a un acuerdo para aprobar el presupuesto federal, provocando una parálisis parcial que afecta a millones de ciudadanos.
Según informó El Universo, la falta de consenso entre el presidente Donald Trump y los demócratas ha prolongado el cierre más allá del récord anterior registrado en 2019.
Cerca de 1,4 millones de empleados públicos se encuentran sin recibir su salario, mientras que miles de trabajadores de sectores esenciales -como controladores aéreos, agentes de seguridad y funcionarios de aduanas- continúan cumpliendo sus labores sin pago.
La crisis comienza a sentirse con fuerza en los aeropuertos y servicios básicos. El secretario de Transporte, Sean Duffy, advirtió que podría haber un cierre parcial del espacio aéreo si no se soluciona pronto la falta de personal.
Además, la ayuda alimentaria para millones de estadounidenses también se ha visto interrumpida. La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, declaró que los beneficiarios deberán esperar más tiempo para recibir la asistencia económica, responsabilizando a los demócratas por haber puesto al gobierno “en una posición insostenible”.
El bloqueo político surge a raíz de una profunda disputa presupuestaria. Los republicanos buscaban extender temporalmente el financiamiento hasta finales de noviembre, mientras los demócratas exigen reabrir el debate desde cero, especialmente sobre las recientes reformas en el sistema sanitario.
En medio del estancamiento, el presidente Donald Trump ha pedido eliminar la regla del filibusterismo, que requiere 60 votos en el Senado para aprobar proyectos de ley, con el objetivo de avanzar sus políticas sin la oposición demócrata. Sin embargo, varios líderes republicanos admiten que no cuentan con el respaldo suficiente para llevar a cabo ese cambio.
Mientras tanto, los efectos del cierre se extienden a lo largo del país: parques nacionales sin mantenimiento, retrasos en programas sociales y una creciente incertidumbre entre los trabajadores federales que dependen de sus sueldos para cubrir necesidades básicas.
Estados Unidos se mantiene así en una tensa espera, en medio de un pulso político que refleja la división profunda entre la Casa Blanca y el Congreso, y que continúa afectando la estabilidad económica y social de la nación.
AUTORA: Merlin Sánchez Tarira – Practicante del Sistema Integrado de Medios (SIM)